ALTERNATIVAS

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7 de febrero de 2022

2 de agosto de 2018

IZQUIERDA Y DERECHA, la diferencia

La diferencia entre derecha e izquierda está en la concepción de lo que somos y hacemos los seres humanos. Eso de que en el Parlamento francés unos se sentaron a un lado y los otros al otro, lo que originó ambos términos, debe ser verdad, pero es solo una anécdota que en realidad no explica nada.

Quienes quieren detener el desarrollo de las ideologías, pensando en eso de que ya no importan la derecha ni la izquierda, que son términos obsoletos, están haciendo ideología pura y dura. Mientras existan ricos muy ricos y pobres muy pobres seguirá esto de la izquierda y la derecha.


Las derechas consideran que los seres humanos somos portadores de cualidades naturales que no se pueden alterar, así como unos son más trabajadores que otros, o más inteligentes, o creativos, el ser ricos o pobres es también parte y fruto de esa condición natural y no se puede cambiar. Así como existen gordos y flacos, hay también pobres y ricos. Es más, afirman que es positivo que sea así, porque el esfuerzo "natural" por crecer individualmente es el motor del desarrollo, la innovación y el cambio social. Los más aptos arrastran el tren de la historia, como una locomotora a los vagones de un tren.

Las izquierdas, en cambio, consideran que los seres humanos no son seres que responden a leyes naturales como las arañas, los canguros o los ornitorrincos, sino que son algo distinto, que han construido sus propias "leyes" de desarrollo.

Las abejas, por ejemplo, no requieren constituciones políticas o ponerse de acuerdo en cómo convivir con sus diferencias, es más, las que nacen obreras serán obreras por los siglos de los siglos, igual que los zánganos; las abejas no conocen el mundo de la libertad. La libertad es un hecho cultural, no natural, solo los seres humanos podemos decidir cada minuto sobre cual será nuestro futuro, individual y social. Por eso somos responsables de lo que somos y de lo que vaya a pasar (y esto sirve para juzgar a derechas e izquierdas por igual).

Desde ese punto de vista el mundo humano es pura construcción social, desde lo básico como la alimentación y la sexualidad, hasta lo más complejo, como el enmarañado enjambre de relaciones destinadas a la producción de los bienes socialmente necesarios para la reproducción de la especie; y eso implica la distribución del excedente y la riqueza.

Un ejemplo actual es el trabajo femenino que a lo largo de siglos no solamente fue poco valorado sino invisibilizado; limpiar la casa o cambiarle los pañales al niño, o cuidar a los abuelos, no era considerado un trabajo, no tenía ningún valor intercambiable en el mercado, por lo tanto y por mucho que trabajaran las mujeres, estas dependían de los hombres que accedían a trabajos reconocidos y valorados, y podían por ello traer el dinero y mantener la casa.

Ser de izquierda significa entender que la distribución de la riqueza es un hecho social, creado por los seres humanos a lo largo de la historia, y que por lo tanto es susceptible de ser cambiado: así como se hizo se deshace y se vuelve a construir, esta vez mejor, más equitativo y más igualitario. Claro que se dice fácil, pero es una ambición tan difícil que se asemeja a una utopía. Pero detrás de las utopías hemos construido y mejorado el mundo.

Y allí entra la responsabilidad ética desde la izquierda. Si se es consciente de que la desigualdad económica es un hecho histórico/cultural y que por ello se puede cambiar, al valorar la actual situación donde los ricos son cada vez menos y cada vez más ricos, y los pobres son cada vez más numerosos pero siguen igual o peor de pobres, no se puede sino asumir el compromiso de hacer algo para cambiar semejante realidad. No hay otra manera, es un asunto de vida, de valores, de integridad, de compromiso...

6 de abril de 2018

TRES TRISTES TIGRES


El exPresidente #Lula en el Brasil pasó de ser un niño lustrabotas en las calles de Sau Paulo, a obrero del metal, dirigente sindical, líder del PT y Presidente del Brasil. Llegó a ser nombrado como el "mejor presidente del mundo" en un par de encuestas especializadas.

El actual dictador en Venezuela, salió del anonimato entre los cientos de conductores de autobuses en Caracas y aupado por el difunto Hugo Chávez llegó a Canciller de su país. Luego, fraude y chicana de por medio, es Presidente.

Morales Ayma era pastor de ovejas, trompetista en una banda de música. Lider sindical de los cocaleros del Chapare, Jefe del Movimiento al Socialismo en Bolivia y de allí en más, el único Presidente que en democracia conquisto más del 60% de los votos, con una popularidad inigualable, que en su apogeo llego a alcanzar a casi el 90% de la población.

Debieran ser Historias Ejemplares, un claro ejemplo de lo que se puede llegar a ser en América Latina, continente de oportunidades democráticas para los más pobres y desarrapados. Desde lo más profundo de la pobreza y la marginalidad, gigantes que se levantan hasta alcanzar la cumbre. Sus nombres debieran repetirse dentro de doscientos o trescientos años en las escuelas.

Pero terminarán su vida en las cárceles, acorralados por la podredumbre de la corrupción y el despilfarro, del narcotráfico también cuando queden a la luz las redes de la cocaína que dicen que los enreda a los tres y a otros menos importantes. Desde la izquierda, desde la igualdad, la inclusión y la justicia social que estos estafadores predicaron, se los recordará como las personas que hundieron las ideologías progresistas, permitiendo que la reconstrucción de las repúblicas que los cobijan quede en manos de la recalcitrante derecha de este continente.

Pero así es nuestra historia, el pendulo catastrófico sigue funcionando.

17 de julio de 2008

el 37 Congreso




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De retorno de Madrid, donde estuve representando al Colectivo Si_Bolivia en el 37 Congreso del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).



La experiencia fue intensa y ojala fructífera. Para la mayoría de los socialistas, laboristas y socialdemócratas del mundo, Bolivia vive un difícil momento, ya que el Presidente Evo Morales ha terminado dependiendo directamente y sin remedio de Hugo Chávez, como parte de una operación continental, que no responde a los cánones democráticos a los que el socialismo europeo está acostumbrado. Se ha perdido el embrujo que cubría a Morales, mostrándolo tal cual es, un líder sindical poco conocedor del funcionamiento de las instituciones, mal informado sobre lo que acontece en el mundo y sin compromiso con la democracia y los derechos individuales.



Germán Antelo Vaca y yo tuvimos la oportunidad de encontrarnos y conversar con representantes políticos de diversos países. La mayoría reclama sobre la desagregación de la oposición de la izquierda democrática en Bolivia; nos dicen que es difícil saber con quien hablar y con quien no, a pesar de que se encuentran con bolivianos en todas partes del mundo, que publicitan a uno u otro partido, una u otra iniciativa. “Hay desasosiego —nos decía Luis Ayala, Secretario General de la Internacional Socialista—, desde que no hay representación boliviana en la IS, no sabemos a quienes escuchar, a quienes creer, a quienes apoyar”.




Les hemos explicado con detalle algunas de las razones para que esto esté sucediendo; como que actualmente la oposición se haya parapetado en los movimientos cívicos y regionales. Muchos dicen que esto es bueno para defender la democracia y las instituciones pero que no sirve para generar propuestas nacionales: no basta ser autonomista para coincidir con otros en visiones globales sobre la sociedad, el país y el mundo. Hay un camino que avanzar en esa dirección y hemos dejado sembrada la semilla de que en Bolivia también será posible una opción propositiva y articuladora de la izquierda moderna y democrática, como nos están reclamando todos.